Este simpático pulpo debe su nombre ( al igual que algún otro miembro de esta familia de octópodos ) a un par de aletas que tienen sobre su céfalotorax. Estos pulpos suelen habitar en las profundidades abisales a unos 2000 metros de profundidad, este junto con otra alguna especie de cefalópodo abisal, constituyen de los especímenes más raros de esta familia de animales.
Viven a grandes profundidades, sin ningún tipo de luz, y soportando presiones increíbles de hasta 200 atmósferas ( 200 kilogramos por centímetro cuadrado ) entre los 1600 y 2000 metros de profundidad y se conocen muy pocos de sus hábitos todavía por eso, siguen siendo un misterio.