Pues que creo que lo tenemos un poquito dejado de lado, este tema, quizás. Nos interesamos todos -yo el primero- por especies foráneas, quizá mas llamativas que las nuestras, pero creo que aún no he visto algún tema específico de las víboras ibéricas. Googleando un poco salen estas tres especies:
– VIPERA LATASTI (Según Wikipedia)
La víbora hocicuda o víbora de Lataste es una especie de serpiente víbora presente en la Península Ibérica, el sur de Francia y el norte del Magreb. Es la vívora más frecuente en la Península, abarca todo el territorio de España y Portugal a excepción de Cantabria y los Pirineos. Esta serpiente es la que cuenta con el veneno menos tóxico de las tres presentes en España, y aunque su mordedura no es mortal, se precisa de asistencia sanitaria par la aplicación de un suero antiofídico especifico.
Este tipo de serpiente cuenta con dos subespecies: Vipera latasti latasti y Vipera latastei gaditana.
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– VIPERA ASPIS (Según Wikipedia, otra vez, pero más completo)
Un áspid (Vipera aspis) es una especie de víbora que se puede encontrar en Europa, Asia occidental y norte de África. En España se puede enontrar esta serpiente en el nordeste, en Cataluña y la cordillera pirenaica. Existe también una población aislada en el curso alto del Duero.
Descripción
Tiene una longitud de por lo menos 60 cm. Los machos alcanzan hasta 85 cm, y las hembras un máximo de 75 cm. Los machos, sin embargo, son un poco más delgados que las hembras. La cola es relativamente corta: un séptimo a un noveno de la longitud de cuerpo en las hembras, y un sexto a un octavo en los machos[1] . La cabeza es amplia, triangular y bien diferenciada del cuello. Las escamas del cuerpo son grisosas o amarillas, doradas o cupreas, con manchas negras o verdosas con borde negro, en aparente zigzag sobre el lomo.
Hábitat
Esta serpiente prefiere áreas calidas con buena exposición al sol, vegetación estructurada y suelos relativamente secos. En Italia y Francia, se encuentra a menudo en áreas montañosas o en colinas, especialmente en regiones de piedra caliza, pero se presenta a veces en llanos bajos. Tiene una preferencia por áreas cubiertas de vegetación o por lo menos con alguna cubierta[1] . Puede ser encontrado en cuestas asoleadas sobre colinas, pantanos, prados en las montañas, claros del bosque, en las fronteras de maderas, en botes de basura y en las canteras.[2] ] En Italia se encuentra en arboledas y a menudo cerca de fuentes[1] . Aunque no es propia de zonas elevadas, en los Pireneos que se ha encontrado sobre 2.100 m.s.n.m.[3]
Veneno
Una mordedura de esta especie de serpiente es muy dolorosa y tiene consecuencias severas. Según Stemmler (1971), cerca de 4% de todas las mordeduras sin tratar, son fatales. Lombardi y Bianco (1974) mencionan que esta especie es responsable del 90% de todos los casos de mordedura de serpiente en Italia.[2] En caso de mordedura en muy aconsejable la visita a un médico para que aplique un antiveneno.
La toxicidad del veneno varía. Stemmler (1971) indica que la población en el districto de Passwang, Suiza tiene el veneno más fuerte. Comparado con los venenos de otras especies, es relativamente tóxico. Brown (1973) da los valores LD50 de 1.0 mg/kg de mg/kg IV y 1.0-2.0 SC.[4] Tu et al. (1969) divulga 4.7 mg/kg IM. La producción del veneno es relativamente baja. Boquet (1964) divulgó un registro diario de la extracción de 9 a 10 mg.[1]
Los síntomas de envenenamiento por esta serpiente incluyen la rápida aparición de dolor agudo, seguido por edema y decoloración. La necrosis hemorrágica severa puede ocurrir dentro de algunas horas. La visión se puede deteriorar seriamente, muy probablemente debido a la degradación de la sangre y de los vasos sanguíneos en los ojos. El veneno tiene efectos de coagulante y de anticoagulante. La actividad del anticoagulante es al parecer más fuerte que la del Daboia russelii. El veneno puede también afectar la estructura glomerular y puede conducir a la muerte debido a falla renal[1] .
Según Cheymol et el al. (1973), el veneno de esta serpiente no afecta contracciones neuromusculares en preparaciones in vitro. La carencia de este neurotóxico indicaría que los casos fatales que implican el sistema cardiovascular son el resultado de una lesión directa del músculo o de la reducción del intercambio de oxígeno. Por otra parte, Gonzalez (1991) divulgó que en dos casos las víctimas desarrollaron síntomas neurotóxicos, incluyendo dificultad en la respiración y al tragar, así como la parálisis del miembro mordido.[1]
Cleopatra VII, reina de Egipto, se suicidó con veneno de la serpiente áspid.
En ocasiones se atribuye erróneamente este nombre a otras especies de víboras, e incluso a cualquier clase de serpiente venenosa.
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VIBORA COMUN O EUROPEA (Vipera Berus Seoanei)
Identificación
Es una víbora de talla mediana, en comparación con otras víboras europeas, con una cabeza grande y marcada, y con un hocico aplastado o ligeramente levantado. La cola es pequeña y representa entre 10-15% de la talla total (Lataste, 1879; Saint-Girons y Duguy, 1976). Los adultos alcanzan los 75,0 cm de longitud total, pero usualmente varían entre los 45,0 y los 44,0 cm (Braña, 1997). La talla total máxima es de 58,5 cm para un macho de 12-13 años y 66,0 cm para una hembra de 11 años, ambos provenientes de Asturias (Braña, 1997); en Galicia es de 59,0 cm para un macho (Galán y Fernández-Arias, 1993); y en Portugal es de 50,0 cm para un macho (Brito y Álvares, datos no publicados). Es una especie muy polimórfica con una variación individual y geográfica notable (Bea et al., 1984).
Variación geográfica
Fue descrita inicialmente como Vipera berus seoanei por Lataste en 1879, pero marcadas diferencias en la morfología externa permitieron su clasificación al nivel específico (Duguy y Saint-Girons, 1976; Saint-Girons y Duguy, 1976). Dos subespecies se reconocen actualmente y están separadas por áreas de introgresión secundaria, donde individuos morfológicamente distintos y intermedios pueden ser hallados juntos (Bea et al., 1984):
Vipera seoanei seoanei Lataste, 1879
La subespecie nominal se caracteriza por un reducido número de escamas ventrales (machos: 137,3 ± 3,0; hembras: 137,9 ± 3,3). Es muy polimórfica, con importantes variaciones en el patrón de coloración (incluye los patrones “Clásico”, “Uniforme”, “Bilineata” y melanismo), en el nivel de fragmentación de las escamas cefálicas y en la toxicidad del veneno. En las poblaciones del País Vasco, Cantabria y áreas costeras y centrales de Asturias, las escamas cefálicas están poco fragmentadas (16,67 ± 4,01 escamas intercantales y intersupraoculares), los individuos tienen frecuentemente el patrón de coloración “Clásico”, y el veneno es menos tóxico (Bea et al., 1984; Saint-Girons et al., 1986; Detrait et al., 1990). En las poblaciones de Galicia las escamas cefálicas están más fragmentadas (22,34 ± 5,72 escamas intercantales y intersupraoculares) y el patrón de coloración “Clásico” es menos frecuente (Braña y Bas, 1983; Bea et al., 1984). En los Picos de Europa hay una elevada proporción de individuos con los patrones de coloración “Bilineata” y “Uniforme” y la toxicidad del veneno es intermedia con la subespecie V. seoanei cantabrica (Bea et al., 1984; Detrait et al., 1990).
Vipera seoanei cantabrica Braña y Bas, 1983
Esta subespecie presenta un número elevado de escamas ventrales (machos: 141,7 ± 3,0; hembras: 143,9 ± 3,5), las escamas cefálicas son muy fragmentadas (24,5 ± 6,65 escamas intercantales y intersupraoculares), el padrón de coloración más característico es el “Cantábrico” [u:350xftty]y el veneno presenta niveles elevados de toxicidad[/u:350xftty]. Se encuentra en el norte de León, en el área sudoeste de los Picos de Europa, y en las montañas de Galicia oriental y sudoeste de Asturias (Braña y Bas, 1983; Bea et al., 1984; Detrait et al., 1990; Balado et al., 1995).
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Señalar una cosilla que me ha llamado la atención cuando surfeaba la red buscando información sobre estas víboras nuestras. Salvando el caso de la Latastei[/i:2mmv52gh], que parece ser relativamente poco tóxica, la Aspis[/i:2mmv52gh] y la Seoanei[/i:2mmv52gh] (particularmente la variedad presente en la Cordillera Cantábrica, y especialmente en zonas de Asturias), poseen venenos que, aparentemente, son bastante potentes. Particularmente, en el caso de la última.
A este respecto, en este enlace hay una información bastante aclaratoria al respecto:
Ah, Ok Salvadori, pues algún error hay por ahí, está claro.
El enlace ese es que me dejó intrigado, porque precisamente de la variedad que ponían con el veneno mas tóxico era la variante asturiana de la "Seoanei", y decían que tenía una toxicidad comparable a la de alguna Cobra… , pero que si es cierto que inoculan muy poca cantidad.
De entrada ya puedes estar tranquilo por qué desde luego su veneno no tiene nada que ver con el de una Cobra, no podemos comparar una hemotóxina / citotóxina con una neurotóxina, a grandes rasgos son muy diferentes la una de la otra.
Me imagino que si, Salvadori, que no se referirá tanto a la composición como quizá, al DL50, me imagino… :» title=»Question» />
Esto es sacado del segundo enlace que pongo, de una de las webs que anduve mirando para sacar información de estas tres víboras:
"En cuanto a la toxicidad del veneno, las víboras aspid y de Seoane tienen un veneno más potente (sobre todo la aspid en lineas generales. Aunque hay poblaciones de Seoane con un veneno mucho más tóxico), pero la hocicuda resulta más peligrosa porque inocula mayor cantidad (la que produce más accidentes fatales). Las tres son potencialmente mortales, aunque existen circunstancias diversas y variaciones locales que se deberían explicar. Estadísticamente mueren unas 7 personas al año en España por mordeduras de estas tres especies de víboras.[/i:1kimqmkg]
Aunque parezca mentira en la Península Ibérica contamos con serpientes que poseen un veneno muy tóxico. Sólo nos salva el que inoculan poca cantidad. Con 30-35 mg de veneno de aspid un hombre adulto se va al otro barrio. La suerte es que suele inocular unos 20 mg por mordedura. Por eso son realmente muy peligrosas en gente más debilitada (niños, enfermos, ancianos), en que una dosis menor produce el mismo efecto. En los demás puede ocasionar trastornos graves o muy graves si no se acude con celeridad al hospital. Y si se dejan pasar demasiadas horas se entraría en un cuadro gravísimo con riesgo de muerte. Si se cumplen las medidas establecidas la recuperación es satisfactoria en la gran mayoría de los casos. Álgunas poblaciones de víbora de Seoane (norte de León, sudoeste de Asturias y zona limítrofe gallega) tienen un veneno más tóxico aun que las de aspid, a la altura de las cobras y las serpientes de cascabel más venenosas y por encima de otras muchas serpientes venenosas conocidas por su terrible fama. En cambio las víboras de Seoane del País Vasco y areas costeras de Cantabria tienen una toxicidad algo más reducida. Insisto, la ventaja es la poca cantidad de veneno que inoculan por mordedura. Por ello, de las tres víboras hispanas la más peligrosa es la hocicuda que, teniendo un veneno menos tóxico (aunque también potente), inocula una dosis mucho más alta por mordedura. Para comparar, la venenosísima cobra común mata a un hombre con 20 mg de veneno e inocula por mordedura de 100 a 300 mg Shocked Shocked Algunas víboras de Seoane tienen una toxicidad similar pero inoculan muchísima menos cantidad de veneno en cada mordedura. Otras serpientes de fama terrible:
-Víbora de Gabón: Inocula 350-650 mg por mordedura y su dosis letal en humanos es de 60 mg (mucho menos tóxica que "nuestras" víboras pero claramente más peligrosa porque literalmente te "llena" de veneno).
-Áspid de Cleopatra o cobra egipcia: 150-350; 25 mg
-Mamba negra: 50-100; 10 mg. La llaman en África "la sietepasos". No comment friolero
-Búngaro común: 10-60; 5 mg
-Serpiente de coral: 5-15; 15 mg
-Serpiente marina picuda: 7-20; 1mg. La más venenosa del mundo.
-Gariba: 15-40; 5mg
-Serpiente de cascabel diamantina: 200-300; 100 mg (muchísimo menos tóxica que las españolas pero muy peligrosa por la cantidad de veneno que inocula)
-Serpiente de cascabel Mojave: 30-100; 15 mg (parecida a algunas de Seoane en toxicidad).
Ah, hay otras dos especies capaces de producir veneno en España pero no son víboras. Se trata de la culebra bastarda y la culebra de cogulla. La primera tiene un veneno algo más potente pero sin llegar al nivel de las víboras.[/i:1kimqmkg]"
Pues Nordés te digo con toda mi humildad que ese texto está realmente exagerado y fuera de contexto, comparar a nuestras víboras con animales como la Bitis gabonica[/i:1w8jdnek] o un Crotalus adamanteus o scutulatus[/i:1w8jdnek], me parece una aberración absoluta. Precisamente las Víboras del Gabón tienen una combinación hemotóxica y citotóxica realmente potente con independéncia de la cantidad inoculada, que además y a pesar de tratar su mordedura con sueros monovalentes, nos dejará secuelas de por vida y en cuanto a los Crótalos ha mencionado dos de los peores, ¿quien a redactado este escrito?
Pues a saber, Salvadori, cualquier "experto" habrá sido . A mi también me parecía muy extraño, aún cuando por mi tierra se dice que la víbora asturiana es "chunga", que fuese mas venenosa que esas especies. Me imaginé que se refería al DL50 (sería bueno poder compararlos ), pero como tu bien dices, en todo mundillo hay "entendidos" de andar por casa, que mayormente fomentan la distribución de información falsa…
Si, en este mundillo hay de todo pero sin duda este se ha pasado bastante.
Piensa también que muchos dan datos acerca de la LD50 pero no concretan a que tipo de mordedura se refieren. Como ya sabrás la LD50 varía dependiendo del tipo de mordedura.
hola que tal, ayer cace una serpiente como esa de la "foto del ganador" lo que desconozco es su especie, la tia mordia y se ponia a "respirar" como si hubieras corrido 10 kilometros a toda prisa… luego la solte , pero es que se habia metido en un lugar comprometido… gracias y un salud…
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