La acción del hombre implicó la desaparición entre 1970 y 2010 de más de la mitad de los animales salvajes del planeta.
Por regiones, las zonas más afectadas son América Latina (-83%), seguida de la región de Asia-Pacífico. Las especies de agua dulce fueron las más afectadas, con una reducción del 76%, mientras que las terrestres y marinas disminuyeron un 39%.
Entre 1970 y 2010, el Índice Planeta Vivo (IPV), que mide la evolución de 10.380 poblaciones de 3.038 especies de mamíferos, aves, reptiles, anfibios y peces, se redujo un 52%.
La bajada anunciada es mayor que en los informes precedentes, ya que se afinó el modelo de cálculo para llevar a cabo una representación más fiel de la repartición mundial de las especies de vertebrados, precisa esta ONG especializada en la protección de animales en peligro.
En su anterior informe bienal (2012), WWF señalaba una reducción del 28% de las especies salvajes entre 1970 y 2008. El índice sólo incluía entonces 2.699 especies.
Las causas de este declive: la pérdida y degradación de los hábitats (a causa de la agricultura, urbanización, deforestación, riego, represas hidroeléctricas…), la caza y la sobreexplotación pesquera (incluso, las capturas accidentales) y el cambio climático.