La historia de Staffie es un ejemplo de la crueldad de las personas. Este perro fue abandonado en una estación de tren al sur de Inglaterra.
su dueño lo ató a uno de los pasamanos situados en el exterior y le dejo un tupper con agua se metió en un taxi y se fue. Horas después el perro seguía allí atado llorando y esperando a que su dueño volviese a por el.
Un trabajador de la estación vio al perro y alertado por su llanto llamó a la protectora de animales . Estos cuidadores están intentado buscarle un hogar lleno de cariño a Staffie para que pueda olvidarse de este triste episodio.