Un artículo publicado por la Biblioteca Nacional de Medicina, basado en un estudio realizado por la Universidad de Michigan en Estados Unidos dio a conocer que el consumo de alimentos procesados es altamente adictivo, ya que la mayoría de ellos están compuestos por ingredientes que en el cerebro producen el mismo efecto que algunas drogas.
En este estudio, el grupo de investigación se encargó de analizar cuáles eran los alimentos que tendrían tendencia a ser los más adictivos. El estudio se realizó con un grupo de más de 500 personas a las que se les realizo un cuestionario referente a una lista de 35 alimentos.
La lista incluía desde pizza hasta brócoli, de estos 18 eran procesados, y la pregunta consistía en si los participantes consideraban que tenían problemas para controlar el consumo de uno a varios de los 35 alimentos de la lista.
Este estudio evidencia que la mayoría de los alimentos procesados poseen altas cantidades de sal, azúcar y grasas saturadas, que son los principales desencadenantes de la adicción a comer en exceso alimentos procesados, ya que interfieren en el sistema de recompensa del cerebro.
Según esta investigación no se trata de que falte fuerza de voluntad para controlar el consumo de alimentos inadecuados una vez que se es adicto, ya que estos actúan en diferentes zonas del cerebro, provocando sensaciones de placer.
Las sensaciones de placer producidas por este tipo de alimentos generalmente anulan en el cerebro las señales de saciedad provocando que las personas continúen consumiéndolos a pesar de que el organismo este satisfecho, lo que podría desencadenar obesidad, esta es una de las razones por las que consumo de estos alimentos es tan poco recomendable.
Estas adicciones se producen principalmente por el grado de procesamiento que tengan las comidas. Lo que en si determinara la adicción a estas, es la presencia y cantidad que posean de carbohidratos refinados como azúcares y harinas, ya que estos se digieren con rapidez.
Nicole Avena, una de las investigadoras a cargo de este estudio señalo que para combatir este tipo de adicciones a nivel mundial, sería ideal tratarlas con métodos similares a los que se tratan problemas como alcoholismo o la drogadicción.
Una de las conclusiones más alarmantes que arrojo esta investigación fue que el alimento que resultó como el más adictivo en el mundo fue la pizza. Esto a causa de que el queso contiene una proteína denominada caseína que libera opioides vinculados con la respuesta neurológica de las adicciones.
En lista continua en segundo lugar el chocolate, que aunque se ha demostrado que en su presentación más pura como el chocolate oscuro brinda grandes beneficios a la salud, las múltiples presentaciones en el mercado que incluyen lácteos y postres demostraron ser bastante adictivos.
También resaltan alimentos como hamburguesas, frituras, helado, galletas, pastel y refrescos todos incluidos en el listado de la encuesta. Esto arroja como conclusión que mientras más procesado sea un alimento, mayor será la respuesta adictiva del organismo hacia él.