avellanoEl avellano es un arbusto grande, de ramas pardas algo flexibles. Posee hojas alternas, rugosas y de forma ovalada, que suele perder en otoño para volver a recuperarlas en primavera. Tiene flores masculinas, recogidas en amentos de color amarillento. Los frutos son las avellanas, tan conocidas y apreciadas por todos.

Familias

  •   Corylus Máxima: ideal para cultivarla en recipiente por su poca altura.
  •   Corylus Avellana Contorta: ramas retorcidas, y de crecimiento lento. También es muy decorativa, sobre todo en invierno gracias a su falta de follaje.

Descripción

Es un árbol que alcanza normalmente entre 3 a 8 m de alto, aunque en ocasiones puede llegar a los 15 m con una copa muy extendida de forma irregular, generalmente ramificado desde la base. De corteza marrón pálida o gris y profundamente estriada, su madera es dura, flexible y muy resistente. Las hojas redondeadas, tienen entre 6 a 12 cm de largo y ancho y son suavemente pubescentes por ambas caras, con bordes doblemente aserrados.

Las flores nacen antes que las hojas, a principios de la primavera. Son monoicas y con amentos de sexo diferenciado; los masculinos de color amarillo pálido y entre 5 a 12 cm de largo, los femeninos muy pequeños y prácticamente ocultos en las yemas de las que surgen los estilos rojo brillante, en número de 1 a 3.

El fruto es la avellana, que se produce en grupos de 1 a 5, cada una contenida en un pequeño y hojoso involucro que encierra alrededor de las 3/4 partes de la nuez. La maduración tarda de 7 a 8 meses y entonces el involucro se abre liberando la avellana.

Cultivo

avellanas

  • En recipiente hay que regarlo habitualmente, ya que si no, las hojas amarillean y caen. En verano, echarle media regadera cada dos días.
  • Cuidado con el exceso de agua, el platillo debe quedarse vacío después de cada riego.
  • Necesita tierra de jardín.
  • El recipiente debe medir, al menos, 30 cm de diámetro, ya que una planta joven dobla su tamaño en una temporada.
  • Colocar en un lugar claro, resguardado del viento.
  • Cuidado con el pulgón (afecta a los brotes jóvenes), el oídio (forma una capa blanca sobre las hojas), el balanino (pica los frutos) y la antracnosis (mancha las hojas de negro).
  • Podar por encima de las ramas laterales con más de cuatro años para que crezcan nuevos tallos.

Distribución

Es una planta de climas templados, aunque tiene un gran área de distribución. Prefiere localizaciones aireadas con una temperatura elevada unida a cierto grado de humedad, ya que favorece la fructificación y el desarrollo de las avellanas.

Su área de distribución de Asia Septentrional pasa a Rusia, Austria, Alemania, Francia, España e Italia. Desde la última glaciación se convirtió en una especie común en el sotobosque de abetos. Actualmente, el límite septentrional de esta especie ronda al paralelo 63º, por el sur llega hasta el Norte de África y se extiende por el este hasta Armenia.

Propiedades y usos

Sus hojas son antiinflamatorias. Gracias al efecto constrictor sobre el aparato circulatorio, se aplica en el tratamiento de varices y hemorroides. Al mismo tiempo, el miricitósido ejerce una actividad antihemorrágica.

Las avellanas se suelen utilizar en pastelería y confitería. Forman parte de la «crema de cacao», hecha a base de cacao, leche, avellanas y azúcar, popular merienda infantil que se unta sobre pan o sirve para rellenar pasteles y bollos. Se utilizan para hacer un licor muy perfumado y con un sabor ligeramente seco.

avellano

Curiosidades

El avellano era llamado Coll por los antiguos celtas y correspondía a la letra C del alfabeto druídico Ogham. En el calendario del mismo nombre, regía la época entre el 12 de junio y el 9 de julio. Las ramas flexibles servían para hacer las famosas varitas mágicas, mientras que las avellanas eran símbolo de fertilidad y sabiduría y aún hoy se ensartan formando collares que se cuelgan de puertas y ventanas. Tradicionalmente, los zahoríes han utilizado ramas de avellano en forma de horquillas para descubrir agua y objetos ocultos.
Según la leyenda, el primer bardo adquirió todos sus conocimientos mágicos (los bardos eran un tipo de druidas) gracias a que probó accidentalmente la carne de un salmón que había comido los frutos de tres avellanos sagrados.