El leopardo es el otro gran felino de Africa y el más extendido. A diferencia del león prefiere zonas con una amplia cobertura vegetal para vivir y cazar. Con un peso de entre 80-90 kilos, es un cazador solitario que sólo durante la época de cría se puede ver en compañía de algún congénere de sexo opuesto. Dotado de una excelente vista y un agudo oído, el leopardo puede cazar desde anfibios y roedores hasta animales de considerable tamaño.
LLegada la primavera, las hembras dan a luz un número variable de crías que pueden ser de 2-6 crías, aunque en los primeros días de vida se puede reducir la camada a menos de la mitad. A partir de las diez semanas, los cachorros ya empiezan a capturar pequeños animales e insectos, más como un juego que como una verdadera acción de caza. Cuando cumplen un año cuando los jóvenes leopardos colaboran activamente en las labores de caza antes de emanciparse definitivamente de su madre.
El leopardo vive en casi todo tipo de parajes en la mitad sur de Africa y Asia. Es un especialista en la captura de primates. Los ejemplares melánicos son comunes en su especie y especialmente en Asia.