¿Tu gato no te hace ni caso? ¡Es normal! Piensa que los gatos no aprenden órdenes de obediencia básica, como “siéntate”, “dame la pata” o “ven”. Esto ocurre porque se trata de animales territoriales e independientes, es decir, no necesitan órdenes para desenvolverse en su vida diaria.
Sin embargo, sí que es posible orientarlos sobre lo que no deben hacer en casa, como subirse a una mesa con comida o arañar el mobiliario. Te explicamos cómo lograr que tu gato te haga más caso a continuación.
Castigos indirectos
Una de las técnicas para lograr que el gato respete algunas normas es utilizar castigos indirectos, es decir, emitir un estímulo que resulte desagradable para el gato, como un ruido inesperado o mojarle la cara de modo ligero con un rociador. Es importante castigarlo justo en el momento en el que practique la conducta inadecuada. Usar cualquier método de castigo una vez acontecido el acto, sólo confundirá al gato y podría dañar la relación existente entre ambos.
Por otro lado, es importante que el animal no se percate de que el estímulo lo emite su dueño. A continuación, las caricias y las palabras amables reforzarán el vínculo.
Nada de castigos físicos
Nunca se deberá castigar al gato físicamente para reprender malos comportamientos, ya que podría sercontraproducente. Esto creará resentimiento, rabia o miedo en el animal. Además, podrías lastimarlo al golpearlo y él podría herirte al intentar defenderse.
Entorno
Por otro lado, es importante frenar el instinto cazador del gato desde pequeño para evitar arañazos y mordiscos. Además, es necesario cubrirle las necesidades básicas, como un lugar adecuado para afilar sus garras, lugares altos a los que tener acceso y una bandeja con arena para hacer sus deposiciones, además de proporcionarle una alimentación rica en proteínas.
Fuente: animalmascota.com