Al igual que los humanos sufren por los callos, nuestro perro también tiene que soportar esta molestia. Es importante tomar algunas medidas para tratarlos y evitar que se conviertan en llagas o un problema más grave por descuido.
¿Por qué se producen?
Los callos en los perros se deben a una constante presión en determinada zona del cuerpo debido a su exceso de peso o al roce con superficies que son demasiado rústicas, por ejemplo la tierra, los suelos de cemento, etc.
¿Cuáles son las zonas más comunes?
Los callos aparecen comúnmente en los codos, siendo más común en los perros de pelo corto, también pueden aparecer en otros lugares.
¿Cómo se tratan?
Para curar los callos en el perros se usa una crema hidratante durante varias veces al día hasta que mejore la piel de la zona y le aporte flexibilidad.
Cuidado: No debes usar la crema para humanos, debe ser el producto adecuado para la mascota recetado por un veterinario.