El Pastor Polaco de Tierras Bajas puede ser comparado con un peluche. Y esa sensación le produce su espeso y largo pelaje, además de su aspecto calmado. Más allá de su tierna apariencia, esta raza muestra una capacidad extraordinaria para aprender. Tienen un estilo propio para guiar al ganado.
Es uno de los pastores más equilibrado. Con el pasar de los años ha sido adoptado y en los hogares como mascota afectuosa y leal a su amo.
Características
- CABEZA: Da la impresión de que su cabeza es más grande que el cuerpo gracias a su tupido pelaje.
- Trufa: La trufa es grande de color negro intenso y las fosas son abiertas. Su caña nasal, es derecha de tamaño proporcional al resto del cráneo. El stop está bien definido.
- Mandíbula/Dentadura: Sus mandíbulas son poderosas y tiene mordida en tijera.
- Ojos: Los ojos del Pastor Polaco de Tierras Bajas son medianos, en forma de almendra y tiene color castaño oscuro.
- Orejas: Las orejas de estos ejemplares son de implantación media, son colgantes, están pegadas a sus mejillas mejillas y están cubiertas de su largo pelaje.
- CUELLO: No tiene papada, el cuello es largo y fuerte.
- CUERPO: El cuerpo de esta raza está caracterizada por presentar un dorso recto, de tamaño favorecedor. Su tronco es ligeramente alargado y con un tórax es profundo.
EXTREMIDADES ANTERIORES:
Las extremidades anteriores de los Pastor polaco de tierras bajas son derechas, con morfología bien estructurada y sólida.
EXTREMIDADES POSTERIORES:
Los muslos son anchos y consistentes.
- COLA: Esta raza nace sin cola.
- COLOR: El Pastor Polaco de Tierras Bajas está presente en diferentes tonos y combinaciones.
- PELO: En el exterior el pelo carece de suavidad y es largo y áspero. El pelaje interior es con un manto interno sedoso y espeso.
ALTURA: A la cruz.
- Machos: De 43 a 52 cm.
- Hembras: De 40 a 46 cm.
Historia
El Pastor polaco de tierras bajas es una raza originaria de las llanuras de Polonia y hay registros de ellos desde la Edad Media. Algunos conocedores explican que puede provenir de las razas de pelo largo de montaña y las húngaras de pelo trenzado. Desde la antigüedad mostraron sus habilidades para pastorear rebaños. Los controlaban con precisión. Durante muchos años en Polonia se les empleo como perros de trabajo y dado su buen desempeño, entre los años 1.800 y 1.900, despertaron el interés de inversores Europeos.
Luego de la Segunda Guerra Mundial sólo quedaron vivo 200 perros de esta estirpe, aproximadamente. La preocupación de los criadores logró recuperar la raza alcanzando en el 2001 el reconocimiento del Club Americano Kennel. Actualmente el Pastor Polaco de Tierras Bajas es reconocido no sólo en Polonia sino también en Australia, Gran Bretaña, y Estados Unidos.
Alimentación
En cuanto a la alimentación, el Pastor polaco de tierras bajas necesita que su nutrición esté acorde con el ambiente donde se desarrolla. Debe contener las vitaminas, minerales y proteínas esenciales para su desarrollo. Se estiman entre 1600 a 1700 Kcal. Diarias para ejemplares medianos.
Comportamiento
El Perro Pastor Polaco de Tierras Bajas se muestra como un perro de trabajo tolerante, inteligente, tenaz y vigoroso. Esta raza se adapta muy bien a la vida en el campo o la ciudad. En la vida familiar, como mascota, son amistosos, cariñosos, leales, les encanta jugar y proteger a los niños.
No suelen ser tímidos, pero muestran una actitud de desconfianza con las personas extrañas.
Cuidado y Enfermedades
Esta raza es muy activa y necesita de actividades físicas diarias. Para cuidar su pelo es importante bañarlo frecuentemente y cepillarlo constantemente para evitar que se enmarañe. El Perro Pastor Polaco de las llanuras es una casta saludable pero puede llegar a sufrir de enfermedades de la piel por eso hay que chequearle constantemente el pelaje para descartar cualquier infección.
